Hoy vamos a preparar Angulas del Monte, en latín Cantharellus lutescens, es un tipo de seta de comestibilidad excelente y con múltiples formas de cocinar. Las puedes encontrar también en las tiendas, si las compras deshidratadas, sólo tienes que ponerlas en agua la noche anterior, y a la hora de cocinar seguir los mismos pasos.
Los ingredientes son:
* Entre 150 y 250g de Angulas del monte
* una guindilla roja picante (seca)
* 2 dientes de ajo
* 2 dientes de ajo
* tres cuartos de vaso de aceite
* sal
(Estas medidas son para una sola persona)
La elaboración;
Lo primero es limpiar bien las setas, como dice Arkaitz; "Que no te preocupe limpiar bien las setas, porque cuando llueve en el monte también se mojan". Una vez limpias se dejan escurrir, y ya dejamos cerca todo lo necesario.
Comenzaremos cortando los ajos en láminas de unos 3 milímetros, es decir, ni muy gordo ni muy fino, y de la guindilla se cortan unos dos o tres pedazos, al gusto picante de cada uno (también se puede hacer con guindilla dulce).
Ponemos la mitad del aceite en una sartén y la otra mitad en la otra sartén. La sartén más grande es donde vamos a poner las Angulas del monte (bien escurridas) a fuego medio, y en la otra sartén iremos calentando muy lentamente el aceite, para cuando llegue el momento, hacer el ajo y la guindilla.
Vamos poniendo una Angula del monte en la sartén, y cuando el aceite coge temperatura, sin esperar a que esté demasiado caliente (porque se queman) añadimos el resto. Consejo de Arkaitz; " Estas setas sueltan mucho agua, y merman mucho, por lo que hay que cocinarlas bien esperando a que el agua evapore, no vallas por la vía rápida y quites el agua, porque pierde todo su jugo".
Una vez se haya evaporado todo el agua, le bajamos un poco el fuego y añadimos una pizca generosa de sal. Y subimos un poco más la temperatura de la otra sartén, a la que añadimos el ajo y cuando veamos que empieza a dorar añadimos la guindilla. (si le quitamos las pepitas a la guindilla picará menos).
Esperar a que todo llegue a su punto, juntar el ajo, la guindilla y las setas, (probar y si es necesario añadir más sal), servir bien escurrido el aceite y comer. BUEN PROVECHO!!
(Estas medidas son para una sola persona)
La elaboración;
Lo primero es limpiar bien las setas, como dice Arkaitz; "Que no te preocupe limpiar bien las setas, porque cuando llueve en el monte también se mojan". Una vez limpias se dejan escurrir, y ya dejamos cerca todo lo necesario.
Comenzaremos cortando los ajos en láminas de unos 3 milímetros, es decir, ni muy gordo ni muy fino, y de la guindilla se cortan unos dos o tres pedazos, al gusto picante de cada uno (también se puede hacer con guindilla dulce).
Vamos poniendo una Angula del monte en la sartén, y cuando el aceite coge temperatura, sin esperar a que esté demasiado caliente (porque se queman) añadimos el resto. Consejo de Arkaitz; " Estas setas sueltan mucho agua, y merman mucho, por lo que hay que cocinarlas bien esperando a que el agua evapore, no vallas por la vía rápida y quites el agua, porque pierde todo su jugo".
Una vez se haya evaporado todo el agua, le bajamos un poco el fuego y añadimos una pizca generosa de sal. Y subimos un poco más la temperatura de la otra sartén, a la que añadimos el ajo y cuando veamos que empieza a dorar añadimos la guindilla. (si le quitamos las pepitas a la guindilla picará menos).
Esperar a que todo llegue a su punto, juntar el ajo, la guindilla y las setas, (probar y si es necesario añadir más sal), servir bien escurrido el aceite y comer. BUEN PROVECHO!!